domingo, octubre 30, 2005

La última mora del jardín...


Este viernes hubo paro nacional en Bélgica. Mi esposo estaba de paro, yo no pude ir a clases porque había paro de autobuses... y nos quedamos en casa. Decidimos meterle mano al jardín y poner "orden en la pea" después de unos 4 meses sin hacer mucho.

Para el que vive en medio del concreto gris de una ciudad, un poquito de verde es bien recibido. En mi casa siempre hubo macetas y maceteros de cuanta mata y flor creciera en "pleno reventadero de sol" como era, y es, el caso de la terraza de mi casa en Caracas. A las orquídeas les construyeron una estantería de la que penden, ordenadas salvajemente, protegidas del inclemente sol y aclimatadas a esos calurosos días de sol impetuoso y esas tardes de lluvia inclemente.

En mi vida, por mi parte materna, las orquídeas siempre fueron parte de mí. En este exilio en el que ando, me las busqué y me las compré. Es fascinante ver lo distinta y a la vez lo similares que son las orquídeas. Extraño mis Catleyas pero no puedo negar que mis Phalaeonopsis son hermosas. Las tengo en amarillo, en blanco y en morado obispo. Y en la cocina tengo un especimen que se destaca por las dimensiones de las flores y las hojas pues mide, sin exagerar, no menos de 1.20 mts de altura...

Hace un tiempillo hablé de mi jardín en un artículo que se llama "El jardín de Victoria" y en el artículo de "Las fotos en desorden de aparición" estaban las fotos. Quien lo vió entonces y lo viera el viernes pasado... no se hubiera creido el show: maleza invadiendo lo que no estaba sembrado. Es que la maleza se empeña en seguir creciendo a pesar de que trato de podarla como sea. Las plantas ya han cesado en la floración y han dado paso a la reserva energética que el clima medio anuncia. Es que este octubre no parece otoño sino fines de un verano y hay días, como hoy, de 18 grados, y días de 14 grados. Hay plantas que ha empezado a perder hojas y plantas que han empezado a cambiar colores... pero se confunden y hay otras que siguen floreando!

Recolectar semillas de las variedades que quiero conservar. Abrir huecos en la pared para hacer un tendido de alambres por el que treparán una variedad de hortensias trepadoras en la pared con menos luz en todo el año y que, a pesar de la falta de luz, florearán. Abrir huecos en la otra pared para hacer un tendido con alambres en los que se afirmarán las rosas trepadoras. Arreglar los rosales trepadores de la entrada para que algún día formen un arco a la entrada del jardín. Deshierbar de punta a punta el jardín. Sacar las plantas que han muerto tras la floración y cuyas semillas ya recolecté. Remover la tierra. Depositar los desechos vegetales en el compostero al lado del gallinero. Entre mi esposo y yo le pusimos orden al jardín...

Los bambúes... esos "echaron hijos" y nos encontramos con 2 retoños que estaban invadiendo áreas aledañas a donde los plantamos. El vecino de al lado estaba loco por unos bambúes y le regalamos estos dos retoños que a vuelta de un año estarán como los nuestros... si acaso les gusta aquel terreno tanto como este. Pero los retoños nos pusieron a pensar: si no nos ponemos alertas, en 2 años puedo empezar a contactar a un zoológico en Japón a ver si me prestan un par de pandas que quieran reproducirse entre los bambúes de nuestro jardín...

Es época de plantar bulbos y a eso me dediqué: escardilla y azadón en mano removí tierra y zanjé la brecha donde iban a ir los bulbos de lirios, de otras plantitas y de algunos tulipanes. Encontré que el gato de la vecina de la casa más allá me revolvió unos bulbos que yo tenía plantado de unos lirios naranja y otros amarillos... este año que viene florearán en 2 áreas distintas y si ese animal se me llega a presentar desprevenido y lo agarro por la cola le voy a dar vueltas en el aire para mandarlo a volar lejos, muy lejos, del jardín. Le encanta romperme las Rosas de la India y desenterrarme bulbos. Me vomitó el camino de piedra del jardín y me "desplumó" los guisantes de olor. Y como lo vea yo haciendo de las suyas en estos días con los bulbos nuevos, juro que voy a inventar qué hacer para espantarlo antes de intentar aniquilarlo...

En mi vida jamá me había llenado tanto de tierra las manos y me había enfrentado a tanto "bicho" distinto. Desde babosas hasta las lombrices de tierra vulgares. Me acordé de cuando le tenía miedo a los "bichos" y los veía volar hacia mí y no había nada volando por ninguna parte. Tenía yo 4 años y los insectos que me perseguían eran mosquitos azul fluorescente... que sólo existían en mi imaginación. Impresionante... el Alien debe haber nacido de alguna pesadilla infantil del que creó el monstruo. Se los juro. Nada mejor que esa época para ser director de efectos especiales de un thriller multimillonario de Hollywood...

Y en eso estaba yo, gateando por tierra sembrando bulbitos a 5 cms de distancia entre sí y pensando en mi prometedora carrera en Hollywood semi frustrada por la superación de una fobia, cuando mi esposo, en el lado del jardín cercano al gallinero, me dijo divertido que fuera a ver lo que hacían las gallinas. Para facilitarse la tarea de verter los "desechos verdes" en el compostero, él había dejado abierta de par en par la puerta del gallinero, único acceso al compostero, y las gallinas observaban, con miedo, lo que había "más allá" de la puerta que normalmente está allí. Un poco conmovida le dije "déjales la puerta abierta, pobres, a ver si picotean algo interesante... si acaso se atreven a salir..." Me recordaban presos que han tenido 20 años de encierro y que, cuando por fin los dejan salir, lo hacen despacio, sintiendo al máximo todo lo que puedan sentir, abriendo los brazos para recibir el sol directamente sin ninguna pared o reja que los distancie... temiendo que les vayan a echar un jalùon y se los vuelvan a llevar para adentro.

Descubrí que tienen 3 temperamentos distintos. Sí, yo, la renuente a ver algo más allá que plumas y picos en estos seres productores de huevos y recicladores de materia orgánica y vegetal que tenemos en el jardín, descubrí 3 temperamentos distintos: hay una aventurera, una medio avispada y una más quedada... pobre, le da miedo todo lo que sea el aire libre. Le encanta sentir "límites": entre arbusticos, entre maticas, entre rejas... limitada.

La aventurera no se conformó con explorar los alrededores del gallinero cuando decidió salir, sino que se fue, pegando brincos, por el suelo recién removido, cazando cuanto gusanito y bichito veía. Seamos sinceros, fue la que se dió EL banquete. La otra, la medio activa, siguió a la aventurera por un rato pero una vez que vió lo bueno que había por ahí, se quedó allí. La aventurera comparó y midió vntnajas y desventajas en el terreno y volvía a buscar a la menos quedada y se iban juntas a corretear gusanitos cerca de donde yo trabajaba, al otro lado del jardín. La quedadita siguió en lo suyo, a un metro de distancia de la puerta del jardín y sin la tierra removida...

Meterlas en el gallinero, fue otra historia. Cansada como estaba, con un dolor de espalda feroz, con las piernas temblándome por el esfuerzo de 5 horas y media de trabajo con pala, escardilla y rastrillo, a gatas y agachada, en cuclillas y de pie, cuando me pidió mi esposo que tratara de acercar la gallina aventurera que estaba por mis alrededores, y la llevara cerca del gallinero... no imaginé que me iba a ver como esos personajes de comiquita que corren de un lado para el otro y se les ve aparecer y desaparecer.

He de haber sido un show porque mi esposo se reía a carcajada limpia. Imaginar a Laura con su metro setenta y dos de estatura arrebujada en un suéter negro talla XXL que me prestó mi esposo para trabajar en el jardín porque es uno de los que él usa para "trabajos varios", con unos jeans bota ancha viejitos que uso yo para andar por casa y con medias blancas en sandalias con plataforma que tengo para "trabajos varios", con la cabeza cubierta por un gorrito de lana de esos de las estrellas del rap... correteando a una gallina con una escardilla en la mano de un lado al otro porque siempre conseguía una nueva jugarreta para evadirme... ha de haber sido el show cómico de la temporada.

Tras corretear por 15 minutos a una gallina y someterla, a pesar de mis gustos, por la "fuerza bruta" valiéndome de la escardilla para remolcarla por el cuello, dimos por concluida la labor. Cierren la puerta pronto que se vuelven a escapar! El resto de la tarde se lo pasaron como león en jaula: de un lado al otro, frente a la reja, buscando un agujero para salir. Si la perra de la lado, Laika, forma complot con estas gallinas escapistas nuestras, puede ser que en pocos días se nos vuelva a aparecer la perra en nuestro gallinero y los vecinos tengan 3 gallina locas corriéndoles por el patio de atrás. Si algo pasa, les juro que se los notifico...

Y con el dolor de espalda exacerbado y la dignidad por el piso, me dirigí a mis labores bulbísticas... cuando me percaté de la última mora del jardín por este año. El moral, un par de palitos verdes cuando llegó, amenaza con invadir toda la reja que le sirve de respaldo. Le gusta el suelo donde está plantado. Le gusta saberse interesante porque no sé qué le ha gustado tanto para seguir mimándolo. Le gusta regalar sus frutos. Le gusta ser el discreto y productivo del "área ornamental". Y parece que le gusta que de vez en cuando le hablen en español.

El moral me hizo pensar otra vez en mis amigos, los que se parecen a él, los que han prosperado a pesar de que se les daba pocas esperanzas, los que se veían super incongruentes y resultaron ser unos bellos arbustos. Los que regalan porque les gusta y les satisface. Los que se encuentran a gusto, de a ratos, con mi compañía. También me hizo pensar en todos los que yo llamaba amigos, antes de venirme, y que a vuelta de un año no llamaría amigos nunca más.

La última mora del año me la comí saboréandola, como se saborean los recuerdos de cosas que ya no serán, que fueron dulces y al final son ácidas y que te sofistican el paladar para poder percibir lo mejor y obviar lo menos bueno. Y al final, de tanta mora comida, llega uno a acostumbrarse al sabor ácido y empieza a ampliar el círculo de sabores. Porque hasta en su ácidez, el limón te regala lo mejor que puede dar de sí para complementar o incluso realzar el sabor de otros alimentos, colores o aromas que acompañe.

Aprendizajes de una mora enun otoño que no parece tan gris...

viernes, octubre 28, 2005

Esta moderna Europa de las grandes conquistas sociales...

Este viernes hubo paro nacional en Bélgica. Paro de transportes, de obreros, de panaderías, de supermercados, de niños, de profesores... Paro de los buenos. La razón? Sencillísima, el gobierno le quiere pasar por encima a la dignidad de los ciudadanos de este calmo reino. El sistema de pensión cambió hace menos de un año y obliga a los belgas a trabajar hasta los 65 años para poder recibir la pensión. La "prórroga" de la edad de jubilación no fue bien vista ni por el ministerio de trabajo ni por el ciudadano de a pie: mientras los ancianos ocupen las plazas laborales, los jóvenes que se insertan en el mercado laboral tendrán menos oportunidad de conseguir un empleo.

Pero el sistema de seguridad social no se da abasto. Cada vez los belgas tienen menos hijos y la pirámide de edad de la población se está invirtiendo. La base ya no la conforma una chiquillada esperanzadora y retozona sino una vejez madura que fuera otrora la base sobre la que se ideó este sistema de seguridad social que funciona basándose en la "generosidad intergeneracional". Me explico: los jóvenes trabajan y parte de su salario va a un fideicomiso del gobierno que lo usará para su pension. Una parte también va a sostener las pensiones de aquellos que nunca cotizaron o que no lograron cotizar lo suficiente para vivir una vejez digna. Como cada vez hay menos jóvenes y más ancianos, las cotizaciones no son suficientes para sostener el sistema y quieren eternizar a la gente en sus puestos laborales para que puedan cotizar lo que deben cotizar.

Ahora bien, la razón del paro no fue por este aumento de la edad mínima para recibir la pensión. Eso fue el año pasado y como nadie protestó con suficiente fuerza, les pasaron por encima. Este año el gobierno pretende aumentar la edad en la que se reciba la llamada "pensión puente". Esta pensión es la que se recibe en caso de que, por problemas de salud, el empleado deba retirarse forzosamente de las líneas laborales y esperar, tras estudios médicos que confirmen su muy deteriorado estado de salud, que llegue la edad de la pensión de verdad y se pueda cotizar la pensión de verdad. Así, esta pensión, que es un porcentaje de la pensión real, sirve de "puente" entre el cese de actividades por problemas de salud y el momento de cobrar la pensión por la que trabajó más de 3 décadas. Actualmente, la edad de esta pensión puente está situada en los 58 años y el gobierno piensa subirla a los 60 años.

A los ciudadanos jóvenes, (léase, 18 a 45 años) el gobierno, a través del fisco, los está "estimulando" (no les cuento qué de bueno es ese estímulo: el fisco se encarga de cobrarles unos impuestos altísimos...) para que se afilien a aseguradoras privadas y se busquen planes de pensión "independientes". Si lo hacen, el fisco les exonera unos cuantos euros al año. En esas está mi esposo y, lógicamente, el día que me toque, lo haré yo también.

Sin embargo, el país está organizado para que no te puedas despegar de la condenada seguridad social. Y digo condenada con todo el sentido del caso: esá condenada a morir y no hay quien pueda detenerlo. Necesitas la tarjeta de la seguridad social a la que te afilies para poder comprar los medicamentos en la farmacia, para que la seguridad te devuelva el porcentaje que te corresponde, para que el hospital te reconozca como entidad humana si necesitas hacerte exámenes o una consulta con algún especialista...

Pero este sistema está condenado a morir porque la población no crece, decrece. Los belgas son unos de los menos fértiles en Europa, el porcentaje de parejas no casadas aumenta cada día más y ya casi se empareja con el 60% de los holandeses. Y cuando no se casan, es menos probable que tengan hijos porque muchísimos son los que piensan que "el matrimonio es sólo para los hijos... hay que darles estabilidad emocional a los niños y que sepan que papá y mamá están casados". En lo que a mí respecta, los niños siempre saben quién es mamá y quién es papá y poco les importa si papá o mamá están unidos ante Dios o ante las leyes por un contrato. Es que a veces este "liberalismo" del primer mundo me dejan, francamente, pasmada... creo que a ratos, la liberal soy yo...

Y ante la perspectiva de la natalidad menguada y la vejez campeando, el sistema de seguridad social basado en la generosidad intergeneracional esá condenado a sufrir. No es la primera vez que a los belgas les han pisoteado los derechos y muchos ni se enteran: van a empezar a regular cuántos exámenes y radiografías por año se puede hacer cada ciudadano bajo el patrocinio de la seguridad social. Si se excede de ese número, los paga usted. Solidario, no? De gran caracter social...

Esa historia no es nueva para mí: hace unos 6 meses necesitaba una citología de control por un seguimiento que hay que hacerle a una cierta dolencia que tuve y la doctora me dijo en mi cara, tan tranquila "es que no lo puedo mandar a hacer en un laboratorio porque sino sale muy caro... te tomo la muestra y la analizo y te digo". Los médicos tienen un equipo en sus consultorios que muchas veces incluyen microscopios, cultivos, cintas reveladoras y medios ácidos y alcalinos... pero me desconcertó en lo más profundo del ser el que el bolsillo prevalezca sobre la salud. Cuando diablos me importó a mí pagar más por estar tranquila? Cuándo se me vió en la cara el que a mí me importara más la cuenta de ahorros que la salud? Por qué el médico (esa era mi angustia más profunda) daba más importancia a la cuenta de ahorros que a mi salud? Qué es esto? Donde diablos fui a caer?

Sin hablar de que en este país, a diferencia de mi Venezuela, tienes que ir a un médico de cabecera que es el que te trata y, si decide que no puede con tu caso, te remite a un especialista. Si decides ir por tu cuenta al especialista, el seguro no te cubre ni el porcentaje que te cubre, ni la mitad del porcentaje que te cubre, ni un cuarto del porcentaje que te cubre.. .te deja que le pagues la cuenta solito. Por lo menos eso es lo que me ha tocado vivir. No sé si es por líos relacionados con las políticas de la compañía de seguridad social a la que está afiliado mi esposo o si es generalizado en Bélgica (creo que es lo segundo más que lo primero, por lo que me comentaron en el "curso de integración"). Entonces qué? Aaaahhh... Has de morir en el médico de cabecera y que pruebe contigo 16 tratamientos hasta que decida que no, que tú caso no lo puede resolver él y te remite entonces al especialista... que ya se quedó sin tratamientos para resolver tu caso y tiene que aplicar lo más extremo porque, tú no lo sabías pero es así, probar 3 veces ya indica que eso se debe resolver con otras vías y el médico de cabecera no puede tratarlo y tú DEBÍAS exigirle que te remitiera a un especialista... Para adivino, Dios, como decían en mi casa...

En fin, el sistema de seguridad social se encarga de hacer esas trastadas y el gobierno se empeña en seguir prorrogando la edad en que la población pueda retirarse a cuidar de su jardín o jugar calmadamente con sus nietos. Los ciudadanos, medio cansados de todo el jaleo, comparando el pasado con el presente (por aquello de que todo tiempo pasado fue mejor...) han decidido tomar las vías del rechazo organizado y pararon el país en un 75% el viernes 28 de este mes...

Y el gobierno? Ha dicho que proteste quien proteste, ellos van a prorrogar la edad de la "pensión puente"...

Diálogos de la modernidad en una Europa que fuera otrora la de las grandes conquistas sociales...

miércoles, octubre 26, 2005

Erase que eramos...

Y la noche lo cubrió todo. Líneas de fuego cruzaban el manto estelar de un color negro azabache que resplandecía con cintas en rojos y naranjas. Con armadura ataviado, él oyó todos los gritos de miseria y dolor que su vida le da para recordar. De un pañuelo en su mano, oprimido en su puño, emanaba un perfume que le hacía verter lágrimas. Y la noche se hizo lentamente día y la luz apareció...

Ante la nueva claridad, volteó a verse y, debajo de su espesa barba, descubrió su armadura ensangrentada. El dolor le laceraba el pecho. La flecha rota seguía allí. Claro, eso habría de ser lo que le mantenía con ese dolor punzante.

Llegaron personas que lo llevaron en brazos a un claro verde, con árboles que le daban frescor y sombra. "La Señora viene a verlo". De pura vergüenza de que su Señora lo viera rendido y humillado se negaba a verla. A ella, que la quería tanto y por quien su vida había arriesgado, se rehusaba a verla así, en ese penible estado, humillado y destrozado...

Y llegó la Señora, su Señora, la razón de su valentía y la que juró proteger hasta con su vida de ser necesario. Ella se acercó y, dulcemente, le tomó su grande y valiente mano y la sostuvo entre las suaves y menudas de ella. Sollozando, sofocado por el dolor, con una tristeza enorme, sin poder detener el llanto que le robaba el aire, le pedía que lo perdonara por tener que dejarla.

La Señora, con su dulce voz, le dijo "Tranquilo, te encontraré. Juro por Dios que te encontraré...". En ese momento, él cerró sus ojos y todo se hizo una gran luz. El dolor en su pecho creció y creció... y en su recuerdo permaneció la magia de ese amor puro y noble y el recuerdo de un pañuelo que su Señora portara en su mano, con un enorme girasol bordado.

Vestida con un traje que la ceñía con un corpiño en la cintura, de terciopelo verde musgo, decorado por cintas juguetonas de color marrón trigo, estaba la jóven en un patio al aire libre. A su izquierda se abría la vista a un cielo cerrado en nubes blancas. Un cielo que pendía sobre una muralla gris de piedra mojada. Y ella, parada en el medio, lejos de cualquier edificio, sintiéndo el frío del aire, como tratando de sentir algo. En su interior se mezclaba la duda con la tristeza y la nada la embargaba. De repente oye que la llaman de una de las torres y empieza a correr sobre la calzada hecha de adoquines de la misma piedra que las murallas que la rodeaban.

Las escaleras de caracol, de una piedra blanquecina y calcárea, están bañadas de una cálida luz que recuerda la del otoño. Las ventanas por las que disparaban los arqueros, estrechas y alargadas, servían hoy de tragaluz para esa escalera. La jóven doncella corría por las escaleras alzando su falda, con sus zapatos haciendo un suave "chs chs" contra la piedra a sus pies. Antes de llegar al piso donde debía llegar, la paralizó la imagen de su señora, la jóven doncella a la que ella servía, acompañada por uno de los altos mandos del ejército atrajeado en su impecable armadura.

La noticia que le dieron la dejó sin pensamiento, sin sentimientos y sin fuerza: al unísono, sus brazos sucumbieron ante la fuerza de gravedad que segundos antes resistían con estoicismo y los hacía elevarse hasta hacer que las manos de ella se entrelazaran entre sí y se acomodaran a la altura de su pecho.

Los ojos del alma se cierran aquí, en el medioevo...

Y hace 2 días, después de unos 500 años de distancia, el velo del tiempo y el espacio se corrió. El sonido de una silla lo hizo interrumpir su descanso nocturno y pensó que sería uno de los gatos. Al ir a revisar, la encontró allí, en la oscuridad, vestida de blanco, con su cara de ternura y complacencia, con la felicidad pintada en sus ojos.

Al ir a encender la luz, para poder ver el camino que lo llevaría al regazo de ella para dejar a su cabeza abandonarse a las caricias de las manos de ella, su amor desapareció y lo dejó allí, con su rostro pintado en el alma y el amargor de haber sido lo bastante imprudente como para prender la luz.

Y en blanco iba ella vestida, como reflejo de la pureza del amor que los une. Descalza, como el ser espiritual que le puebla los días y le acuna las noches. La imagen de ella hoy quedó en la retina de él en el hoy, tan vívido como el recuerdo más hermoso del ayer que los unió y los hizo jurarse una eternidad de búsquedas hasta hallarse para, finalmente, juntarse...

lunes, octubre 24, 2005

Alegría...






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Alegria
Come un lampo di vita
Alegria
Come un pazzo gridar
Del delittuoso grido
Bella ruggente pena,
Seren
Come la rabbia di amar
Alegria
Come un assalto di gioia

Alegria
I see a spark of life shining
Alegria
I hear a young minstrel sing
Alegria
Beautiful roaring scream
Of joy and sorrow,
So extreme
There is a love in me raging
Alegria
A joyous,Magical feeling

Alegria
Como la luz de la vida
Alegria
Como un payaso que grita
Alegria
Del estupendo grito
De la tristeza loca
Serena
Como la rabia de amar
Alegria
Como un asalto de felicidad

(Alegría. Del show el mismo nombre. Cirque du Soleil)

Uno de los discos con mayor venta de todos los que tiene el Cirque du Soleil. Un show aclamado por el mundo entero. Un espectáculo barroco donde se conjugan disfraces, criaturas imaginarias, música, luces y artes circenses depuradas hasta lograr ser un canto a la perfección rigurosa.

Lo que yo conozco del Cirque du Soleil es la exaltación de lo más puro de las artes corporales llevadas al circo: equilibrios increibles, fuerza física bruta al extremo, flexibilidad llevada a límites insospechados... y todo, presentado con la plasticidad, gracia, arte y coordinación de un ballet.


Los temas que trata este show de Alegría, según la reseña de ellos, son varios: el poder y su deterioro con el paso del tiempo, la evolución de antiguas monarquías a democracias modernas, la vejez, la juventud. Y es con este fondo que los personajes del show toman vida. Reyes y tontos, aristócratas y mendigos, juglares y niños crean un universo, junto con los clásicos payasos de todo drama, para resistirse al paso del tiempo y las transformaciones sociales que lo acompañan.


Y de todas las canciones que he oido y que más me han gustado del Cirque du Soleil, además de la que ví en el espectáculo de los trapecistas de las elásticas en Saltimbanco, es esta: Alegria.

Oir a la cantante, escuchar su voz áspera cantando con tanta pasión esas notas que le hablan en una lengua que no le es nativa en ninguno de los 3 idiomas, me conmueve. Lo hacen a drede, descubrí después. A un cantante rumano lo prueban con canciones en inglés. Es el sentimiento lo que debe salir. Si no sale, no da la talla y se buscan a otro.

Esa música metálica, incesante, como el ruido de una fábrica, como una de esas "usinas" de la revolución industrial... repetido, con un eco que se oye al fondo, disimulado por el suave arullo de un cello... le sirven de fondo a una voz que a pesar de su aspereza tiene la capacidad de seducir, como al tacto lo seduce el terciopelo.

Y la letra en cada idioma difiere para lograr la rima pero cada una deja tanto para reflexionar, tanto para soñar, tanto para anhelar. Les regalo la letra, les regalo el comentario, les regalo el enlace, a ver si no me demandan por querer regalarles la música...

Alegría... para mí hoy es un día gris de cielo cubierto de nubes que lloran sin parar... Alegría... sueños de colores fulgurantes, de juglares con niños, de osadas piruetas, de increibles trucos, de ilusiones y sueños, de dramas y magia... Alegría...del ayer y el mañana... de cuerdas y metales... de vuelos abrazando esperanzas, de lámparas de luz y oscuridad. De los antónimos que nos hacen y nos complementan... Alegría...

sábado, octubre 22, 2005

Carta a M....

Tengo una amiga en Venezuela que en pocos meses dará a luz. Algunas amigas le organizaron un "baby shower" y una de ellas me avisó. Como yo no tenía representación física en Venezuela, me dijo que el regalo mío se lo daba ella... y como es tan conciliadora y dulce me dijo "escríbele tú la tarjeta". Hela aquí...

Querida C…
Esta tarjeta acompaña dos regalos hechos con un único cariño. En realidad, creo, la destinataria inicial de la misiva es, ni más ni menos, que la chiquitica a la que homenajearon: M. Así pues, espero que con cariño le guardes esta misiva… o se la cuentes algún día.

Querida M…

Este regalo que te hacemos hoy tu tía E y tu tía Laura no lo tendrás para cuando puedas leer esta carta o la puedas comprender cuando tu mami te la lea. Te cuento: tu tía E te tejió un suéter precioso blanco y rosado… eso es novedad en ella ahora porque hasta hace como 2 meses no sabía absolutamente nada de tejido y tu tía Laura la ayudó con una cosa que se llama “cámara web” a montar algunos puntos de crochet… y se puso a hacer maravillas y se lanzó a inventar y te tejió una preciosidad que me tiene las babas en el piso. El regalo de ella es un regalo visible hecho desde el más grande de los amores: el deseo de no dejarse caer ante las dificultades… y las ganas de verte ya, linda y sonreida, en el suéter que te tejió.

El regalo que te hice yo a través de ella… pues fueron unas medias. Monísimas todas, para que no te dé frío nunca, o mientras se pueda. No las tejí, no las hice, no las bordé… nada de lo que hubiera soñado hacerte. Es más, creo que ni voy a poder conocerte recién nacida sino hasta que tengas ya algunos meses. Me perderé de esa placidez con la que te dormirás en la cuna del retén, no te veré abrir los ojos en esas primeras incursiones que hagas en el mundo, no te veré bostezar con la calma del que ya comió y es querido y es feliz por el simple hecho de que se le sabe amado y querido. Nada de eso. Te veré, quizás, cuando empieces a sonreir, o cuando empieces a hacer charquitos de baba porque te van a salir los dientes, o quizás cuando empieces a gatear y ver el mundo desde otra perspectiva (es muy nota esa perspectiva de ese momento… no la pierdas nunca… ) Es que me mudé a Bélgica hace un año casi y no he conseguido ordenar mi vida… ni mi cuenta bancaria. La gente grande, ya lo verás, se complica mucho la vida con una cosa que se llama “dinero”. El dinero ayuda a conseguir muchas cosas que te producen felicidad. El acumular mucho no es bueno, pero el tener poco, tampoco es bueno. Mami y papi te pueden explicar más sobre eso, pregúntales cuando quieras.

El regalo mío fue hecho con cariño... y las reflexiones que te voy a dar ahora son un extra que pretenden complicarle la vida a tu mami y tu papi. Lo que te voy a decir a continuación, son unos consejitos que he sacado de la vida que he vivido hasta ahora y que, creo, tu tía E y tu mami comparten:

La tierra no es sabrosa para comer. Esas ideas de tu hermanito no son buenas. Las flores, algunas, sí. Los pensamientos, las rosas y algunas orquídeas son comestibles. No son “uy, qué bárbaro” pero saben mucho mejor que la tierra húmeda. Le puedes preguntar a tu tía E para que averigüe qué flores son más sabrosas. Y te juro que la mermelada de rosa es divina…

La luna nos rige la vida a todos los seres humanos, pero a las mujeres más. Cuando seas grande, como tu mami y como tus dos tías, entenderás que la mujer tiene más agua que los hombres en el cuerpo… y las mareas suben y bajan con los ciclos de la luna. Tengo información científica que podrás entender cuando tengas unos 7 añitos. Se la voy a dar a tu mami y ella te explicará todo. Ya vas a ver qué fácil que es. Sólo créeme: esta bien que te guste ver a la luna, ella también es parte de ti.

Las estrellas son como el correo del cielo. Ellas nacen y mueren... pero algún día te hablaré de eso. Por ahora, te cuento que si las miras, y encuentras una que te gusta mucho, es la tuya. Cuando estés muy triste o muy solita, mírala, búscala... y te sonreirá (es decir, brilla diferente, cambia de color un instante, algo distinto… o simplemente te sigue dando su luz). Seguro que es la sonrisa de alguien que te quiere mucho y no te puede mirar en ese momento. Es un correo muy eficiente...sólo que hay que ser paciente.

El agua de lluvia en los charquitos: es divina para chapotearla!!! Pero es mejor si no te da gripe por chapotearla y mojarte. Pídele a mami que te ponga botas de lluvia y el impermeable y brinca y corre en la lluvia y salta en los charquitos…

La arena: que no te caiga en los ojos! De resto? Es linda para hacer castillitos y verla correr entre tus deditos. Algún día entenderás qué relación tiene la arena que se escapa entre tus puñitos con los buenos momentos de la vida. Se parecen mucho: son chiquitos, son muchos y pasan rapidito. Pero eso lo entenderás lueguito. Por ahora, juega con la arenita.

Un abrazo dice mucho y hace muy felíz a la gente. No cuesta (tema del dinero. Preguntar a mami y papi) nada y es portátil. Carga uno siempre a mano: nunca se sabe qué papi, mami , tío o amiguito triste encuentres por allí y con un abrazote de los tuyos, todo se hace menos pesado. Ya lo verás...

A veces la gente grande se pone muy brava y te regañan muy feo. No es todo tu culpa. A veces la gente grande tuvo un mal día y están tristes, cansados, tienen sueño, hambre o necesitan cariño… y entonces se comportan como tú cuando tienes algo por el estilo: no saben lo que sienten, no saben cómo expresarlo y como tu vienes a pedirles algo o hiciste algo que no estaba bien, pues no aguantan mucho más y explotan. Procura hacerle caso a mami y papi y cuando te griten duro, recuerda que no es para lastimarte…

El sol. Te hablé de la luna y no el sol. Sin sol, no verías la luna. Eso te lo puedo explicar con calmita. O mami. O tu papi. Sólo te quiero decir que a veces no vemos las cosas que hacen posible el que sí veamos a otras. Recuérdalo. Todo tiene un por qué y un secreto… y todo funciona como debe hacerlo.

Sólo espero que te pueda dar un abrazo pronto… y que algún día podamos hablar muchote de estas y otras cosas, como por qué los elefantes tienen pelos en la trompa y las vacas no vuelan. Por ahora, te dejo tranquila. Ya te fastidié bastante. Un besote grande y un abrazote para ti… tu tía Laura y tu tía E.

viernes, octubre 21, 2005

Frente a la estación...

Eran las 4:30 de una tarde gris, con brisa fría y cara de llover. Me entretenía yo con una revista al lado del palo que indica que la parada del autobús esta allí, justo frente al letrero en la calzada que con mayúsculas dice "BUS". En eso levanté la vista. No pude evitarlo, era como si la presencia de ella me hubiera llamado.

Su tez blanca es de un blanco impecable... no con tonos rosáceos o verdes o amarillos. Blanco nieve. Sus ojos azules límpidos y grandes que quizás me parecieron enormes por el cristal de aumento de sus gafas para corregir algún problema visual. Cabello castaño con visos rojizos que avivan un rostro que, de lo contrario, sería una desteñida imagen de ella misma, recogido en una impecable cola de caballo en su cabeza.

No era una cola de caballo negligente, de esas que cuelgan a la altura de la nuca. No, se erguía altiva en la parte posterior de su cabeza, casi tan desafiante como la colita color verde manzana que la decoraba. Una desafiaba a la gravedad y la otra a la uniformidad de grises del día.

Camiseta manga larga color fucsia, contrastando con la colita, a juego con los jeans. Collar de cuentas transparentes rojas y andar desenfadado. Se veía que ella no le temía a los colores ni a espontaneidad, cosa a la que parece terminar temiéndole los seres que viven por acá.

No es la primera vez que la veo que sale del bar frente a la estación y que, con paso decidido y alegre camina hasta la tienda de al lado: un comercio de esos provisto de puras máquinas expendedoras de cuanto puedaimaginarse el ser humano... y un poco más. Lo de ella parece una pasión irresistible por la máquina de las chucherùias dulces... y una intriga constante sobre lo que hará la máquina que despacha "mini pizzas" y "sopas calientes".

Pero hoy, mientras yo hojeaba la revista, la ví acercarse al quicio de la puerta de ese local. Iba ocn su mismo andar, alegre y desenfadado, con su bolso azul cielo, marca "puma" y con toda la determinación que le produce a uno tener las ideas claras. Se sentó en ese escaloncito y abrió su cartera. Sacó una bolsita de plástico con un montón de moneditas de las de un centavo y la abrió para sacar de allí el creyón de sombra y el brillo para los labios.

Me pareció curioso el sitio que ella tenía para sus cosméticos. Con las monedas más menudas, con sus monedas. Como otro objeto preciado que no sabe muy bien cómo utilizar pero que la llena de un pequeño orgullo. No sacó espejito alguno, eso también me llenó de curiosidad. Cómo se iba a delinear nada sin espejo? Con tanta curiosidad acumulada, con la lectura bien interrumpida, ajena al contenido del artículo que me leía antes, decidí ver qué era lo que haría a continuación.. .con el rabillo del ojo. Porque ella, antes de proseguir, volteó a ver si alguien la miraba. Qué harùia a continuación? decidùi mirar con disimulo.

Con calma destapó el creyón, puso la tapita a un lado. Con calma desenroscó la tapa del brillo de labios y con ansioso frenesí por apurar hasta la última gotica del tubito, le daba con la brocha sujet aa la tapita. Frotó con la brocha del brillo la punta del creyón que tenía destapado... y volvía a mojar en el brillo la mágica preparación. A continuación veo que lo restregó (no lo aplicó) en sus párpados cerrados. Y luego repitió la operación 3 veces más hasta que estuvo satisfecha del resultado. Nunca se vió en un espejo.

Con calma enroscó la tapa con la brocha en el tbito que encerraba el brillo de labios y lo lanzó a la bolsa de las moneditas. Prosiguió a buscar la tapa del creyón y la encontró al lado de su zapato. La muy pícara se escapó de entre sus piernas. Enrrolló el extremo de la bolsita y le hizo un nudo con sus deditos finos y menudos y colocó todo en su cartera azul cielo.

En ese momento la ví pararse, dar una vuelta sobre uno de sus pies y detenerse en seco... para salir corriendo con su cartera en la mano. Se metió al bar y se asomó en la puerta. Volteé a ver en el sentido en el que ella miraba y entendí todo perfectamente: el señor cuarentón que venía caminando, con su metro setenta y dos de altura la asustó. Con sus 5 añitos de edad es perfectamente comprensible...

Porque la coquetísima criatura de la que hablo no tendrá más de 5 años y una visión del mundo que muchos adultos han perdido. Cuándo dejaron de asustarme los adultos por la estatura? Cuándo se desapareció esa magia que hace que no nos importe lo que la gente piense de nosotros y hacemos lo que queramos hacer, sólo porque nos provoca? Cuándo dejé de dar vueltas en un pie porque me pareció lindo?

Y hoy me volví a recrear en lo que me gusta e hice lo que me provocó. Porque yo también tengo hoy 5 años... y gozo un puyero con mi blog.

jueves, octubre 20, 2005

Ayer...

He visto a dos niños
jurarse abrazados
eternas locuras
que sé que ningún ser humano
se las ha enseñado

Y he visto a la vida
volar de sus manos
he visto a dos niños mirarse a los ojos
sentirse felices, de estar amarrados
yo he oído el poema
que le ha dedicado

Tu huella es mi paz...

Y tu horizonte es mi temor
pero tu huella es mi paz
aunque jamás será lo mismo en aquel rincón
porque le falta el temblor de tu cuerpo
y le falta la noche el relente
y la envidia de la gente
y es que yo he oído el poema
que le ha dedicado.

Silencio
Silencio
Silencio que en la cama de un amante
la magia duerme poco, no?
Pero se acuesta antes
Silencio, silencio
que la magia duerme

Silencio
Silencio
que en la cama del amante
la magia duerme poco, no...
pero se acuesta antes.

Y he visto a la gente
pasarles rozando
y he visto que algunos se han ido
y algunos se quedan,
y algunos jamás han estado
y he visto a la vida sentarse a su lado
y al fin esa niña mirarme a los ojos

(Silencio. Del disco "El alma al aire". Alejandro Sanz)

Distraído la has escuchado. Tú, yo no oigo a Sanz. Sabes que me da angustia oirlo ahogarse en gritos. Sabes que sí, que sus letras a veces me gustan. Y tantas veces has oído esa canción. Pero esa noche te paraste frente a la ventana, encendiste un cigarrillo y los ojos de tu gata te mostraron otros, al lado del teclado, frente a la pantalla... y pensaste en tantas cosas.

Y anteanoche oías otra vez el disco. Y esa canción que tantas veces has oido te parecío tan distinta, "tan tuya..." dijiste. Y no soy pero sí soy... tu crees que yo soy, y por eso soy. Con un nudo en la garganta y los ojos a punto de llorar repetiste la frase "en la cama del amante la magia duerme poco... pero se acuesta antes". Se acuesta antes, claro. Y sabes por qué. Y me dijiste el por qué. Y entiendo tus por qués. Y entiendes mis por qués.

Así como sólo tú y yo entendemos esas palabras, de la única forma que debemos entenderlas, así mismo sé que tú vas a entender estas que tomo yo de la misma canción. Y sé que las entenderás de la única forma que deben ser interpretadas: "y he visto que algunos se han ido y algunos se quedan, y algunos jamás han estado". Siéntete bendecido... te repito como aquel día que me dijiste que viste a los ojos de tu gata y viste aquellos que tanto te dijeron, que tanto te comunicaron...

"Tu huella es mi paz aunque jamás será lo mismo en aquel rincón porque le falta el temblor de tu cuerpo". Y sigues siendo huella. Y sigo siendo huella...

Besos de mariposa para tí. Muchos. Miles...

Vuela alto, cometa de luz...

martes, octubre 18, 2005

Todo ocurrió en un sueño...

Hoy te ví. Por primera vez te ví y hasta te sostuve en mi mano. Te toqué, te tendí la mano, te la sostuve y te alcé hacia mis brazos, hacia la luz, hacia el cielo claro. Te saqué de la fría oscuridad y te traje hacia la calidez de la claridad. Y sentí tanta paz en ese breve instante en que te toqué. Hoy, por primera vez...

De mi túnica blanca salía un reflejo de la luz en el cielo que nos cubría a tí a mí. A lo lejos, a mi izquierda, se veía la infinita tela de un óleo azul ocn tintes violetas que le servía de fondo a la nube que lo velaba parcialmente y sobre la que yo estaba apoyada, acostada sobre mi pecho, para sostenerte.

Abajo de mí, al alcance de mi brazo, tu mano esperaba. Cubierta por una espesa oscuridad que no me dejaba ver ni siquiera el codo de ese brazo, estabas tú. Y la sentí tan conocida, con tus dedos regordetes, con sus pliegues diminutos, con tus uñas perfectamente recortadas, con esa suavidad que no las hace tan tersas como las mías pero tmapoco ásperas o rugosas. Una mano sin callosidades, sin asperezas, sin ampollas. Una mano cuyo dorso cubren hirsutos vellos negros, que abundan hasta los dedos mismos. Una mano que se abría a recibir, con tanto para dar. Una mano que se alzaba por encima de la oscuridad. Una mano que se abría sin desespero. Una mano que sabía que venían a buscarla y sostenerla para, con amor, alzarla...

Y luego ví mi mano, una mano que sin prisas se apuraba a sostener la tuya, a rodear con mis dedos la base de tu pulgar, a estrechar con firmeza aquella mano que me extendías. Ví mi pulgar cerrarse alrededor de tu pulgar, y con ese acto, toda mi persona se llenó de paz. Veía tus vellos enredarse en mis dedos. Sentí el calor de tu mano en la mía. Sentí que de entre ese contacto mágico surgía la claridad necesaria que me hizo decirte con voz suave, pero no susurrada "tranquilo, aquí te estamos esperando..."

En un instante, tu alma me hizo saber, sin voz, que ahora estabas tranquilo. Intenté alzarte y desperté...

...porque todo fue un sueño.

A la hora exacta, en el momento preciso, hoy, cuando más necesitabas que alguien te sostuviera la mano, en sueños viajé a tu lado, y en Venezuela estuve un instante para cargar con tu alma, comunicarme contigo y llenarte de la energía y la protección necesaria para que no divagaras sin rumbo en la oscuridad del limbo. Hoy conocí y sostuve una parte de tí que me llevó a ser la base y el apoyo de una que no me había sido revelada. Hoy, por primera vez viajé en sueños fuera de mí...

.. y fue un gusto enorme haberte conocido hoy en persona, Daniel. Porque nada fue en un sueño....

Carta de amor mitológica...


Ven, ven a mí...
Yace en mi una flama que no se extingue, una pasión que se acrecienta al verte rondar cerca de mí, un río de emociones que se mezclan y se apartan, que se encienden o se apagan, al ritmo de tus miradas y tus caricias.

Sígueme, acerca tu alma a la mía. Sé que tu hoguera espera por mi madera para hacer un cálido chisporroteo de ternura y pasión. Baila, baila cadencioso siguiendo el ritmo de tus sentidos. Acércate despacio a mi piel que no puede contener mi ser...

Me escapo, y vuelvo... se han apagado las luces alrededor nuestro, nos alumbra tu luz en mis ojos y mi pestañear de gozo al saberte de mí, en mí... Tu boca musita una canción que acaricia lo más secreto de mí. Tus manos diseñan el contorno de un cuerpo que no abarca mi deseo. Tu piel pinta la mía con sudor de miel y lágrimas de caricias leves. mi voz se desgarra en los acordes de tu lengua lujuriosa...

Y se repite la eterna danza de los amantes en luna llena. Me dejo caer ante tus caricias, y recorro con mis dedos tu alma. Desnudo con mis manos tu voz y, al llegar al amanecer, se me abre tu ser en un segundo y por un instante somos dos en uno...

Me dejas temblando en tus caricias que duermen en nuestro lecho. Me hallo cubierta por la brisa del suave amanecer. Tú, como buen vampiro, has vuelto a desaparecer. Y mi respiración descansa y mi cuerpo busca seguirle. Sin verte, sé que estás allí: entre mis cabellos, enredado en mis pechos, cantando en mi cadera, durmiendo en mi cintura...

Qué hace un hada de luz amando a un vampiro?

Crear...

Así dice la pestañita sobre la que oprimo cada vez que mis deditos me piden una página blanca sobre la cual escribir para este blog. Tengo varias, una que dice "editar entradas" y otra que dice "estado". Pero la primera a la izquierda, la primera de toda la serie, la primera en la que caen tus ojos, en la que luego, por costumbre y uso, busca tu mousse, esa es la de "crear".

Sí! Crear. Ando con el ánimo por el piso. Por lo que les contaba ayer. De paso que ando con un dolor maluco en el vientre y me descompuso el día y la rutina: no fui a clases porque entre el frío (que hoy se instaló en serio, hasta ayer se insinuaba, pero creo que no estamos a más de 10 grados hoy, de un sólo tirón se nos fue 6 grados en picada sin pedirle permiso a nadie ni pasar un memorandum... Se la calan y punto!) y el malestar, la cosa se hizo dolor. No tengo buscapinas... tenía años que no me daba nada. Me monté una cobija en el vientre, prendí el calefactor y me encerré acá a buscar información de unas cosas que me interesan, que me conciernen y que me incumben. Organicé la carpeta de holandés... y una vez que me sentí mejor, me enfrenté cara a cara con mi yo meditabundo y cabizbajo.

En realidad no debo estar cabizbaja, nada me ha pasado. Y todo lo que tengo, pasará. Aún si yo no lo quisiera. Creo que era Rousseau quien decía que si la juventud fuera un mal, sería uno que se curaría muy rápido. Es que todo pasa. Todo se va... y nos deja cosas. Por eso es que todo pasa y todo queda.

Pero la creatividad no se va. Esa se queda. Qué pasa con ésa entonces? Pasan ráfagas de creatividad? Períodos de mayor productividad? Períodos de instropección, reflexión y cambio? Será?

No lo sé. Pero hoy quiero crear. Y me puse un reto más o menos alto: transcribir un post que tiene como 2 semanas en mi adormecida libreta de notas "in absentia" (o sea, cuando estoy en clases y veo algo y digo "ya está, de esto hago un post hoy"...) y responder a un comentario hecho por un amigo que estoy descubriendo a través de sus letras y su prosa, Lestat.

Sigo en franco intercambio con mi mugre para definir detalles sobre nuestro nuevo proyecto... bueno, tan pronto se conecte ella! Tengo un par de ideas que darle. Y sigo creando...

Porque el día que deje de tener algo irresoluto, algo sin hacer, algo inconcluso, algo pendiente, ese día, no antes, me puedo sentar a morir porque no tendré nada por lo que luchar, creer o soñar. Y la vida, sin sueños, es un infierno asfixiante...

Gracias A por el empujoncito emocional hoy...

lunes, octubre 17, 2005

Dada de baja por falta de sintonía...

Mis queridos todos...

Estoy desinflada. Perdónenme la franqueza. No quería definir tan públicamente mi falta de ideas. Pero tengo una cabeza dividida en 2 preocupaciones... una angustiosa que se niega a abandonar las esperanzas, y una esperanzada que se niega a caer en algún pensamiento de angustia. Les explico...

Un amigo de mi esposo está, desde el miércoles pasado, peléandose mano a mano con las Parcas su vida. Con 32 años quizo lo que sea que me da por llamar "el destino" que su carro fuera chocado desde atrás por un camión, diera vueltas en la autopista y saliera volando por el puente sobre el que iba pasando... en el canal opuesto al sentido en que él iba. Al caer a tierra se le hizo mierda el frente a su camioneta... el lateral se le había reventado contra la defensa del puente en el vuelo sin paracaidas.

Eso ocurrió a las 11:30 de la mañana del miércoles, hora belga. A las 8 de la noche, hora belga, lo operaron de la lesión en la columna y dos costillas rotas. No pudieron antes porque tenía una hemorragia por esas costillas y tenían que estabilizarlo primero antes de operarlo. Menos de 24 horas más tarde le extraían el bazo.

El fin de semana no supimos nada de él. Hasta el viernes sabíamos que se estaba recuperando y le había formado zaperoco a una enfermera y luego se disculpó. Hoy me dicen que tiene una hemorragia en los pulmones y lo reconectaron al respirador artificial... y no vamos a hablar de que en la columna le arreglaron un disco que se le había dañado y si en 3 semanas no hay cambio, podría quedar imposibilitado de caminar el resto de sus días.

Henk es el único amigo que puedo llamar como tal en Bélgica. Se acordó de mi cumpleaños en medio de su loca cabeza. Y siempre me ha empujado a seguir adelante. Hemos compartido monedas y cuentos... y está al borde de morir. Y me rehuso a creer que no caminará más. Se pueden imaginar que "morir" no me cabe en la cabeza, verdad?

Mañana le abren el pecho a otro amigo, en Caracas esta vez. Operación a corazón abierto para reemplazo de válvula mitral y corrección de otra de esa menudenicas que asustan por el nombre que le ponen. A este amigo lo veo con laureles de triunfo en la cabeza. Y quiero que siga todo con esa tónica.

Explicado el panorama... con una vela hoy por la salud de Henk y mañana por la salud de Henk una y por la operación de D otra... me dirán que puedo escribir algo? estoy muy prosaica para nada concreto como no sea la simpleza de una rutina que me abstraiga de la irrealidad de esta cruda verdad. La vida, al final, es un soplo....

"Todo pasa y todo queda,
pero lo nuestro es pasar
Pasar haciendo caminos,
caminos sobre la mar"
Antonio Machado

viernes, octubre 14, 2005

Amores que deben morir

"A dónde van los amores que deben morir?" Era la pregunta que me hice a mí misma hará más de un mes, mientras hablaba con mi amiga C en torno a una canción que se llama "Sin testigos" y que canta un joven colombiano llamado Luciano Pereyra. Los pongo al tanto: en la canción, el chico le dice adiós a la chica con la que tuvo una relación pasional y emocional y que, a pesar de que él considera muy bella, no puede continuar. Le asegura que él se guardará el secreto de todo lo que entre ellos hubo para no dañar la confianza y la relación que existe con un tercero. En la canción no se aclara si el tercero está de su lado o del lado de la chica.

Si alguien oyera esa canción sin haber estado en una situación parecida, es casi seguro que hubiera pensado algo del estilo: "si hay un tercero, por qué hay un 'ellos'? Eso significa que no es felíz con esa persona, ese tercero... sino, no lo engañaría!". O "para qué la deja? No entiendo. Igual él no es felíz con la novia... y tampoco logrará ser felíz con la novia jamás. Por lo menos que deje a la novia y sea felíz con esta". O incluso la de "es un machista de mierdaaaaaa!! Engaña a la novia con esta y siempre lo hará... y la estúpida no se da cuenta de que le están montando cachos?"

Y sin embargo, para quien lo ha vivido, la canción tiene mucho, mucho sentido. Este tipo de relaciones son las que, desde su no ser, nos define lo que las otras sí son. Son estas relaciones las que le dan alas a un pedazo cautivo, reprimido, o incluso oprimido, de nuestro ser. Y son relaciones que no pueden ser, del mismo modo que esa parte de nosotros que en ellas se recrea no puede, no debe o no le permitimos ser la más representativa o exacerbada de nosotros.

Y sin embargo, parece que no hay respuesta a la pregunta de a dónde se van esos amores que no pueden ser, que fugazmente nos alimentan, que parcialmente nos complementan y que amamos tanto. Estoy segura, eso sí, de que nunca los podemos olvidar porque una parte de ellos, la misma que en ellos se recreó, vive en nosotros, sigue siendo parte de nosotros. Dulcemente, incluso con nostalgia, esa misma parte de nostros los recuerda por siempre. Lo que de ellos aprendemos, queda con nosotros... sigue siendo parte de nosotros.

Pero, acaso alguien tiene la respuesta de a dónde se van los amores que deben morir? La necesito para sanar el corazón de dos amigos y para mi paz mental...

miércoles, octubre 12, 2005

El papelón

Tenía 5 días con gripe. Ayer un amigo en Barranquilla me dijo que me hiciera un té de "panela" con limón. Y como le confesé que no sabía qué era la "panela" me dijo "ya como que te volviste europea y no te acuerdas de que eres india?". Le expliqué que a lo mejor también lo teníamos en Venezuela pero no con ese nombre y que si me explicaba qué era, quizás podría entenderlo.

La panela resultó papelón. Como las "gradas" peruanas resultan ser "escalones". Y lo mismo me pasó con "arrecho" en Colombia... que tiene que ver más con el "quesúo" que con el "molesto" venezolano. O las "frutillas" argentinas que son, ni más ni menos que las fresas. El "Cachuelo" es en Perú lo que es el "rebusque" o "el matatigres" en Venezuela. La "mina" argentina "es la "jeva" puertorriqueña que se nos pegó a los venezolanos y es lo mismo que la "chavala" española... o el "tesa" colombiano es, ni más ni menos que el "huevito" venezolano o el "genio" del español estándar...

En conversaciones con la cutícula, más de una vez la mugre y yo nos hemos visto en discusiones metalingüísticas... claro! en Argentina se "hace quilombos" y en Venezuela se "hace un ocho" aquel que no sabe cómo resolver un problema. En Argentina se "dobla" y no se "cruza" una calle para indicar que se ha de doblar con el carro a derecha o izquierda. Y como esas? Miles de otras expresiones. Es que mientras más amigos hago en el mundo hispanohablante, más me doy cuenta de lo enormemente vasto, lo ricamente regional y lo pintorescamente colorido que es ese tapiz verbal que llamamos "español" o "castellano". Y yo, por no meterme con regionalismos, lo voy a llamar "español", aunque se originó en Castilla. Es que desde que nació, hasta nuestros días... mucho ha cambiado ese dialecto que surgió en un lugar de Castilla de cuyo nombre no quiero acordarme... porque ahora es Castilla-La Mancha y el Quijote se nos pudo haber perdido en el habla.

De Argentina a Perú, el español cambia como la geografía. De México a Colombia, como el mar. De Nicaragua a España como el cielo. No hay ninguno mejor, no hay ninguno peor. Todos los acentos son músicas distintas que reflejan las necesiadades de un pueblo por adaptarse a la realidad que le tocó vivir. Los países hispanohablantes estamos unidos por la lengua tan mixta que se nos ha hecho tan propia y tan autóctona que ya no podríamos vivir sin ella.

Somos una amalgama de puntadas y colores que teje un sueño hermoso... para el que quiera arroparse con esa colcha.Aunque estoy muy lejos de mi entorno hispano, no me olvido de donde vengo. Es imposible. Decía una colega mía en estos días que tenemos un monstruo de idioma. Es verdad. Pero es un monstruo como todos: lleno de detalles delicados. En cada escama brilla una nota musical. En cada diente se oye una canción. En cada mancha, se siente el ritmo de los siglos que nos llevaron a ser uno en miles... y miles en uno.

Y sin embargo, no habría argentinos sin chilenos ni peruanos sin ecuatorianos ni venezolanos sin ecuatorianos. Nos definimos por lo que nos diferencia y a la vez, nos diferenciamos en lo conocido. Sigo siendo india. Sigo siendo negra. sigo siendo Blanca. Sigo siendo venezolana. Pero sé que no soy sino una puntada del tapiz que entre todos bordamos.

Y será por eso que me fascina el sonsonete cadencioso del argentino tanto como la prisa desmesurada del chileno que todo lo corta? O la perfecta pronunciación de las S del colombiano, que se suaviza en el peruano? Y será por eso que me encanta el bailoteo rítmico del mexicano tanto como la jocosa sevillana del andaluz? Será que la música de todos ellos forma parte de lo que me distancia de sus culturas, tan ricas como la mía, y me acerca a la ancestral que nos une a todos? Será que la cercanía con todos ellos me hace ser más yo?Y no lo sé... pero me gusta ser así. A ver quién me roba el español de la sangre....

lunes, octubre 10, 2005

Café número 100


Un sonido del viento en tus cabellos. La permanencia de tu mirada en mi piel. El suave ruido del batir de tus pestañas. Unos profundos ojos café. La cortina de esas espesas cejas recias. El rugido de tu piel contra tu alma. La ruta trazada por tus dedos en mi alma. La paz de la incertidumbre que me produces. El camino de tu fragancia. El mar de tu mirada. El vuelo de tu ansiosa calma. Tu pretendida ansiedad. Tu certitud agazapada. Y ese brillo que a lo lejos me acorrala...

Un momento de duda. Un instante de certeza. Un abrir y cerrar de almas. Un portazo a la palabra. Un vacilar de certitudes. Un murmullo del silencio. Una ola de deseo. Un fluir de imposibles. Una torpeza en la precisión. Tus caricias en mi mirada. Tu cara angelical. El chisporroteo de un infierno en tu mirar. Un desnudo a través de mi respiración...

.. .y tu me vuelves a vestir con la lujuria de tus labios.

Cultura latina... o lo desconocido por la europea?

"Por qué los Latinoamericanos resultamos fascinantes para ustedes, para los extranjeros?" Era la pregunta que se hacía mi amiga C y que ahora formulaba a viva voz. Para explicarse, para aclarar esa "fascinación" de la que ella hablaba, decidió contar su historia con sus antiguos novios (no colombianos, no "latinos".. ."extranjeros") y al final decía "para mí es un honor que me digan eso de que como los latinos nadie porque yo, honestamente, no considero que seamos tan especiales..."

Mi esposo decía que era algo ventajoso, no un obstáculo, lo de formar una praeja "multicultural". Toda la conversa había salido a raíz de un comentario casi accidental de mi amiga tras ver la reacción de los hinchas españoles que venían saliendo del estadio de Bruselas tras ver el juego de España-Bélgica en el que salieron ganando 2-0 y a ningún español se le veía una sonrisa en el rostro. Mi amiga C y yo decíamos que en Venezuela o en Colombia la selección nacional ganaba un partido.. .y la gente se lanzaba a la calle a gritar y brincar. El esposo de ella, F y mi esposo, se lanzaron a decir "no, es el clima...", " es que hace frío..." y mi esposo dijo "por eso es que a mí me gusta la forma de ser de ustedes, son tan diferentes... la semana pasada estuve en una fiesta de unos amigos venezolanos de Laura y era el cumpleaños de la niña de ellos y habían niños de parejas con latinos y de parejas belgas u holandesas.. .y con sólo verlos, se puede saber cuáles son los niños de parejas latinas y cuales no, porque son totalmente distintos".

En el momento en que mi amiga planteó su pregunta, yo iba a decirle algo y ella me pidió que la dejara continuar en su explicación. Comprendí que mi papel era el de simplemente dejarla hablar porque lejos de darle una respuesta que yo consideraba adecuada, ella y nuestros esposos me revelarían algo que yo no sabía.

El comentario de mi amiga era resultado de la genuina curiosidad que sentía por las razones que motivan a los "extranjeros" casados o que tuvieron algún amor de origen latino y quer resultan "más papistas que el Papa"por el hecho de que no sólo les gusta, sino que veneran la "cultura latina"... sea lo que sea que el término quiera decir.

C llegó a la conclusión de que los belgas no es que sean fríos sino que son menos expresivos. Su esposo, F, luego de como 15 minutos de "interrogatorio conversado" me reveló que se enamoró de C por su expresividad. Y ante mi pregunta de qué era esa expresividad de la que él hablaba, me reveló que era el lenguaje corporal a lo que él se refería. El no quería dar a entender que se había enamorado de otra cosa que no fuera de la persona que es C... pero a punta de preguntas y comentarios de las dos, viéndose acorralado, F no respondió y C le sacó las palabras de la boca "tranquila, es que de los 5 puntos que más le gustaron de mí, todos están relacionados con mi cultura".

Agarré una servilleta y empecé a anotar este post.

Casi sin proponernoslo, empezamos a hacer "interrogatorio cruzado" por turnos. Llegado el punto, pedí la definición más adecuada que cualquiera de ellos dos pudiera hallar a lo que se había convertido en un término que lo resumía todo y que yo, no entendía: "cultura latina". Decidieron dividir el término y definieron cultura como "todo aquello que resulta visible para los ojos extraños que la miran".

Por turnos, la colombiana y la venezolana le sacamos, con cucharilla, de la boca de ese par de belgas esposos nuestros, características que, según ellos, definan a la cultura latina: "los latinos tienen un espíritu grupal más fuerte que los europeos, que son más individualistas...." Al decir eso, F no se incluyó en la sopa... él mismo no se considera individualista... "Son más positivos ante las 'marchas atrás' de la vida que los europeos... si algo sale mal, bueno, no importa, siempre hay un mañana y ya veremos qué hay dispuesto para mañana..." decía mi esposo.

En esas estábamos y C volvió a comentar que, desde que ella anda por acá, está averiguando qué es lo que hace que los chicos "extranjeros" que han tenido algún amor con origen latino (ella asegura que eso es más frecuente en los hombres que en las mujeres... ya hizo su sondeo de mercado por lo visto) vuelvan a buscar otro querer con orígenes latinos, tal y como hizo un amigo mútuo quien, tras terminar su relación con una chica peruana trató de establecer contacto con puras belgas y llegó un momento en que se dijo "chamo, así no puedes seguir, esto no es lo tuyo, quedaste marcado a fuego... a buscarse otra latina!" finalmente se casó con S, una chica peruana, amiga de C y mía.

Sigo sin haber oido la respuesta. Mucho se autointerrogaron, hablaron.. .el tema incluso derivó sobre la innata vanidad y coquetería de las latinas ("la piel será bonita o fea, pero es suave en una latina... porque se la cuida" decía C) que las hacía totalmente diferente a las desgarbadas y, sobre todo, descuidadas belgas... Ambos estuvieron de acuerdo en este punto pero, en el anterioro, no hay respuesta concluyente.

Sé, sin embargo, que mi esposo no se piensa ni por un segundo lo de quedarse viudo y casarse con una belga. O si, en caso de que lo nuestro no funcionara, divorciarse y buscarse una belga. Se lo pregunté el otro día, hablando de multiculturalidad y la fiesta de los venezolanos, hablando de niños visiblemente diferentes por el hecho de tener una bilingüalidad que los lleva a una biculturalidad que no identifican pero que los marca. Sé que lo único que sacamos en claro C y yo la noche del sábado es que nuestro espíritu, esa fuerza que nos impulsa a ella o a mí son las que empujan a este par de belgas con el que vivimos. Sé que esa fuerza de espíritu y ese optimismo "tan grande que a veces creo que raya en la locura" como me dijo C del de ella, son los que hicieron que este par de belgas, F y J, se replantearan los valores de esta sociedad en la que viven y se sintieran intrigados sobre cómo con tan poco se puede ser tan inmensamente felíz... y todavía no lo entienden el todo pero les gusta cómo suena el asunto.

Y se me viene a la cabeza todas las cosas que mi esposo ha dicho de nuestra cultura que a él le gustan: "es que no son mezquinos... siempre te dan de lo que tienen para comer si caes por la casa a la hora de la cena... y no se los puedes rechazar! Siempre es sabroso!" o la de "la gente es lo que ves: si tienen la cara torcida en una morisqueta, es porque están molestos, si sonríen es porque están felices.. .sonríen en la calle! Eso no lo vas a ver nunca por acá, sabes? Nunca..." o la de "la gente no se hace un problema por todo, siempre hay un mañana en el que se puede resolver todo, lo que sea, por muy grave que sea..."

Yo no sé si la posibilidad de tener un mañana para resolver todo "y hacer lo que se pueda hoy y sino se hará mañana" es lo que hace que mi esposo sea un entusiasta de la "cultura latina". No sé, todavía, qué lo hizo casarse conmigo. Se ríe de mi entusiasmo casi infantil ante la neblina que sale de mi boca con 7 grados centígrados... o la alegría loca que me produce ver el sol después de 3 días lloviendo. Ese infantil entusiasmo por todo... esa alegría que me produce oir una canción que me guste y poder bailarla o cantarla a placer y satisfacción sin que me importe un pepino quién vió porque, al fin y al cabo, no le hago mal a nadie... eso de expresar lo que veo y lo que saboreo, lo que siento y lo que me acerca o aleja de la realidad que me circunda, eso y nada más, quizás, sea la "pasión" de la que habla mi esposo y que me hace ser tan diferente al resto de las mujeres que viven por acá. Estoy segura que él se enamoró de esa diferencia visible, de esa "cultura" que no puedo definir porque yo no la veo ni extraña ni ajena ni especial. Es una forma de ser y nada más.

C y yo, creo que jamás llegaremos a saber qué es lo que ellos dos llaman "fascinante" de nosotras. Pero quizás esta aproximación inicial nos sirva a las dos para entender qué es lo que pasa con ese par de seres que vive con nosotras. Porque para ella y para mí, esa "pasión", esa "intensidad", esa "loca" manera de ser y vivir es, simplemente, la única manera en que concebimos vivir. Vaya usted a saber cómo será vivir las otras maneras... pero esa, a los extremos, al todo por el todo, al aquí y ahora, es la única que ella y yo conocemos. Y quizás nunca sepamos vivir de ninguna otra...

viernes, octubre 07, 2005

De reposo...

Tengo un resfriado que se me declaró hoy: la nariz me corre y la garganta dejó de dolerme. Estoy en casa, contemplando por mi ventana la inercia del tiempo que parece no transcurrir en este pueblo cubierto por el sopor de una niebla débil. Tal parece que las nubes se hubieran deshilachado en jirones y los restos nos han caido aquí, en el patio y el frente de la casa. Ayer estuvo igual. Y la luz mortecina y azul que cubre los jirones que apenas la dejan pasar, llega débilmente a mis dedos y apenas ilumina las teclas. Por eso prendí la luz a pesar de que son las 4 de la tarde...

Estoy de reposo. Pero no sólo por el resfriadito este. Aprovecho la excusa de un paro de transporte ferroviario para no descuidar la gripe. Paro de trenes. Y me acordé de los paros de camioneticas y autobuses en mi Caracas natal. Cuando se para el transporte, se para medio país. Y agitan banderitas los sindicalistas, pero luego todo sigue igual... porque no hay sindicalisto activo de verdad.

Que por qué lo digo? Okey, en Bélgica hay 3 grandes sindicatos: azules(liberales), verdes (cristianos) y rojos (socialistas). Al paro de hoy convocaron los sindicalistas rojosVoy a tomar una sola empresa de ejemplo... el caso de Barco. El sindicato de esa compañia de tecnología audiovisual no hizo absolutamente nada ante el despido masivo de 25 gerentes. Se quejaron colegas, autoridades y subordinados pero el sindicato no reivindicó ningún derecho de ninguno de los despedidos en la decisión unilateral de uno de los altos directivos de la empresa.

Hoy decidieron armar huelga por alguna razón que ni mi esposo, empleado de la compañía en cuestión, conocía. Lo único que se sabe era que el sindicato rojo se paraba hoy. Por eso el sector de los correos y el transporte murió hoy viernes en Bélgica. Los rojitos se pararon frente a la empresa tempranito y le dijeron a mi esposo, cerrándole el paso, que se devolviera a su casa, que hoy había huelga. Como él insistiera en que iba a trabajar, le dijeron que no era solidario y tal y cual... y el les sacó en cara lo de los ingenieros despedidos en masa. Lo dejaron pasar y no le dijeron nada.

Mi esposo se preparaba para atar su bicicleta al ridículo espacio que les han asignado a las bicicletas y motos de los empleados de la compañia: fuera del todo del estacionamiento, a orillas de la vía de circulación que rodea al edificio de la empresa. Si en el estacionamiento han robado y saqueado autos, qué no harán con las bicicletas y motos expuestas a la vista de todos? Ah! Aclaro que por la misma brillante cabeza que propuso poner las bicis en la calle, pasó la idea de meter el carro que la empresa otorga a los ejecutivos más encumbrados... en el estacionamiento interno del edificio. Los empleados se quejaron ante el sindicato, pidieron que la compañía pusiera un sistema de seguro extra para cubrir las posibles pérdidas. El sindicato no les paró ni perinolas a los empleados y no ha hecho ningún reclamo ante los patronos. Si lo han visto antes, no me lo digan, ya lo sé, es pura coincidencia...

En eso ve mi esposo que se acerca uno de los autos de la empresa, un Civic último modelo de un furioso rojo, y los sindicalistas, que se habían vuelto a cerrar en formación y gritaban consignas, casi al unísono se callaron y se apartaron. Al "chivo" no lo pararon. Por qué al empleado que si no va a trabajar le descuentan el día sí le cierran el paso y al patrono, al que le están exigiendo que respete los derechos que ellos reivindican, sí lo dejan pasar?

Quiero creer que, como diría mi amigo valón (de la parte francófona de Bélgica) "es que esos flamencos no saben hacer un carajo bien".

Y me pregunto si acaso la huelga ferroviaria servirá de algo hoy... cualquiera que sea el propósito que llevaba implícito y que ningún medio se encarga de reseñar. Sólo hablan de que, según los convocadores al paro (los socialistas), la huelga fue todo un éxito porque casi no hubo transporte público en Bélgica el día de hoy.

Y me pregunto si acaso el paro de trenes y autobuses es muy distinto al paro de carritos y autobuses de mi Caracas natal... Y me pregunto quién defenderá los derechos de los empleados que por caprichos de uno de los empleadores, y bajo algunos tecnicismos que los salvan de ser objetos de fallos de los tribunales laborales, pierden su trabajo de la noche a la mañana y con caracter de inmediatez. Me pregunto si, al fin y al cabo, el primer mundo y el tercer mundo son muy diferentes... neblina y luz mortecina aparte.

jueves, octubre 06, 2005

Sueño de una oruga

Son, oficialmente, las 10:10 de la noche en Bélgica. A esta hora, mucha gente está durmiendo ya. Yo, bicho nocturno, estoy en la red. Para mi familia y amigos son apenas las 4 de la tarde en Venezuela. Hoy, una de mis amigas está a punto de entrar a quirófano para una operación que, literalmente, le cambiará la visión del mundo.

S sufre de unos respetables 6 grados de miopía. Yo sufría de 5 hasta hace 4 años. Mi padre fue operado de cataratas a los 33 años, la miopía la heredé de él. A los 9 años empecé a usar lentes y a los 18 mis padres me dijeron que, bien visto, señorita ya, lentes de contacto era lo mínimo que podía hacer por mi rostro. Empezamos con eso...

Mi ojo se cerraba más rápido de lo que mi mano podía acercar el lente. Y nada. El lente lo portaba con comodidad, no me irritaba ni nada. 99% del planeta podía usar lentes de contacto y yo también. Pero helas, de los que necesitábamos los lentes de contacto, yo era una de esas que no podía acercarse el bendito adminículo a los ojos sin cerrar el párpado. Luego de probar, volver a intentar y no lograr nada, con los lentes en la casa y todo, me declaré renegada a seguir luchando contra mis instintos más primarios de conservación del globo ocular... y me conformé con llevar los lentes normales, las "gafas" como las llaman en España.

A los 22 años estaba yo en plena carrera universitaria. Mi hermana tenía 2 años usando lentes (ella es 3 años menor que yo y debe de haber sido una versión mejorada porque la miopía se le manifestó a los 17 años...) y acababa de romper el 3er par en 2 años. De paso, yo tenía que hacerme un nuevo juego porque la fórmula se había vencido, según mis últimos exámenes. Mi padre decidió que sería bueno operarnos. A las dos.

Nos presentó el plan. Yo, reaccioné con terror. Mi hermana se lanzó de una: "síiiiii.. .quítenme estos malditos aparatos que no los soporto..." y acto seguido, los lanzó contra el piso y arrancó a llorar. Yo, expresé mis miedos: "Y si algo falla y me quedo ciega?... "

Ese mismo miedo me lo confesó S hoy, en su mañana, mi tarde, mientras chateamos animadamente. Le conté paso a paso cómo fue la operación mía: "la anestesia es en gotas. No hay anestesista. No tienes un par de lámparas de cirugía encima de ninguna incisión porque NO te hacen una incisión. El bisturí es un laser. La sutura no existe... si la operación casi parece la antítesis de la operación clásica! Te echan 2 goticas, te colocan una cosita que ayuda a inmovilizar tu ojo... no te tienes que preocupar en que si lo vas a mover y el laser no te va a cauterizar lo que no debe... nada de eso. Te "afeitan" la córnea con un aparatico que casi no suena, y sientes un frescorcito. Te disparan con el laser y luego te "barren" algo con una pistola de aire o agua, te cierran la solapita de córnea que te abrieron y listo, te mandan a tu casa. Usarás unos protectores en los ojos para que ni te los estrujes ni te los rasques cuando estés dormida y al día siguiente te los quitan y listo."

A las 9:40 pm me escribió por el celular (tenemos fiebre de mandarnos mensajitos desde hace como una semana...) "Voy camino al matadero" y le respondí "Cancelado! No es matadero. Vas camino a la libertad... Un beso oruguita, te veo a tu regreso como crisálida. Mañana serás mariposa" Ella me dijo que con ese mensajito le había llevado a alcanzar a su musa y que sus ojos la dejarían ver más nítidos los colores....

El mundo se me transformó hace 4 años. Es parte de mi cotidianidad ahora no ocuparme sino del maquillaje que adorna mis ojos, de desmaquillar bien su contorno... y de llevar lentes de sol. Viví más tiempo con lentes que sin ellos y cuando por fin me los quité, el mundo se horizontalizó... las barreras de "zonas borrosas" que tenía fuera del marco de los lentes, desaparecieron. El horizonte se me hizo infinito y la brisa me daba en toda la cara. Me sentía "desnuda" en un cierto sentido... y me expandí en mi yo interior.

A S sé que la cosa de quitarse los lentes que ha usado en las últimas 3 semanas previas a la operación, le va a parecer delicioso. Pero el quitarse los lentes de contacto, las "lentillas" en España, le va a parecer algo extraordinario. Segura estoy de que le va a cambiar la vida. Espero con ansias lo que tenga para decirnos sobre ese cambio de visión. Mientras, sostuve un diálogo calmado con mi dios para su exito en la operación...

... porque yo sé que mañana, ella será una mariposa mucho más hermosa de lo que era hoy.

Me llamaron puta y me dió por reirme!

Tengo una vida sentimental que parece una novela: me enamoro del que no me quiere, me cae mal el que me ama con locura y desespero, no se me declara uno que me ama en secreto y con devoción y yo lo considero simplemente amigo, un amigo me revela que yo le he hecho creer por meses que quería entregarme a las pasiones más físicas con él... me interpretan lo que no es y no me interpretan lo que sí digo. Opté por aclarar de entrada a mis amigos que lo que ven es lo que es y que si quiero algo se los haré saber directamente porque no me iba a poner a "lanzar indirectas". Me he evitado más de un problema así...

Para mi sorpresa, mi vida sentimental sigue siendo una novela. Tengo más vueltas y recovecos, he amado y desamado tanto, me he entregado de pensamiento y cuerpo a tantos amores platónicos que, en realidad, si los hubiera llevado a la vida real todos, hubiera terminado por creer que era una mujer como esas que define Arjona en su canción Reputación "Tu reputación, son las primeras 6 letras de esa palabra...."

Y sí, de haber materializado todo lo que me imaginé con tantos hombres que he amado y querido, no hubiera sido sólo una puta, sino una re-puta. Como la chica de la canción. Aclaro que Arjona a mí me parece un machista de mierda... pero él, en esa canción que compuso, dice que la ama precisamente porque su enorme ternura se mezcla con todas esas caricias exóticas y esos besos que aprendió a dar después de haber pasado por las manos de unos y otros. Es decir, él le agradece al final que se haya dado a la tarea de aprender de uno y otro... porque crea un contraste con su enorme ternura, la que le prodiga porque lo ama a él. Bella, no?

Ahora bien, tal parece que Arjona es el único que le ve algo bueno a las putas, a las que les dedica varias canciones. Habla de los burdeles como una abarrotería de amor, en una canción homónima, en los que no había edad ni clases sociales, si cumplías con la tarifa tenías tu pedacito del cielo". Bueno, quizás exagero. El género masculino, en general, ve con buenos ojos a las putas. Es más, los hay que le preguntan a la amante si la pueden llamar así... Digo yo en mi cabeza "diferente a las demás" que algo debe haber de orgásmico en aquello de saberse el dueño exclusivo de una mujer que resulta ser en la cama la tigra que no es la esposa o la novia formal. "Mi puta"... como un sueño infantil hecho realidad, como saberse un perfecto Jeque que tiene el vigor sexual inextingible necesario para satisfacer a semejante fémina que parece insaciable y siempre dispuesta a complacer en todo a su amo y señor. Y luego dicen que el poder no levanta la líbido...

Yo, como mujer latina, como mujer venezolana, desde mi más tierna infancia recibí el concepto que marca pauta en nuestra sociedad y define nuestras vidas dependiendo del bando (o el sexo) en el que caiste: hombre o mujer. Y dentro de la categoría de mujer está la subcategoría "decente" y la otra, la negra, la que se debe evitar a toda costa: "puta".

En mi naturaleza está inscrito algo que hace que no tenga tantas amigas como amigos. Primera razón de zozobra entre mis padres. Una muchacha con tendencia a tener más amigos que amigas... será eso bueno? Nunca se opusieron a que yo tuviera amigas, amigos y amigos del tercer sexo. Siempre hube de presentarlos... aunque sólo fuera a través de meses de hablar de historias construidas con ellos. Y sólo si hablaba mucho de alguno de ellos (ellas nunca fueron motivo de preocupación, eran "ellos") empezaba mi madre a rascarse el coco... y a poner a mi papá sobre aviso.

El concepto de "puta" persigue el subconsciente de todas las mujeres. Sean o no sean putas. Y muchas se hacen rollos mentales: seré una puta? Habré sido lo suficientemente descarada como para que él crea que soy una puta? No me voy a rebajar a ese nivel, cual si yo fuera una puta!! Ahora, yo digo, "ser puta" no es ejercer un oficio? Es una profesión, la más antigua del mundo, según tengo entendido. Es que no me imagino a Homero escribiéndo su Ilíada con un ataque de abstinencia prolongado... quién quita que le debamos sus obras maestras a la sabia caricia de alguna mujer que lo hiciera creer qu epodía hablar con los dioses y relatar sus proezas...

El caso es que la puta es siempre anónima. Catalina la Grande, la Zarina de Rusia, con fama de ser una mujer exigente en la cama, era lo que muchas mujeres califican de "puta": una mujer que había tenido una intensa vida sexual en los brazos de muchos hombres. Pero nadie osa llamarla a ella, la Grande, la Zarina, la figura política, religiosa y eje central de Rusia por parte d ela historia de ese país, una "puta". Aplica lo mismo para el caso de Elizabeth I, la llamada "Reina Virgen". Virgen porque nunca se quiso casar, pero la lista de pantalones que desfilaron por la alcoba de esa mujer que, por razones políticas, decidió no tener consorte que pudiera hurgar con comodidad en sus asuntos de Estado es tan larga... como se la puedan imaginar. Pero ella tampoco es una puta, porque la puta es cualquier mujer anónima... una pequeñez del cotidiano.

Y por eso, por el anónimato, es que muchas mujeres del cotidiano se asustan ante la posibilidad de ser una "puta". No obstante, lo que me llama poderosamente la atención es lo que el concepto significa entre mujeres. Es usado airadamente para ofender a alguien en su yo más profundo... señalándole que es un ser bajo, ruin, carente de moral y del respeto mínimo por lo establecido en las costumbres como "decoroso" y, por ende, es capaz de robarle a "SU" hombre al que ella, como orgullosa esposa o novia o prometida debe, como sea, defender y salvar de las garras de semejante criatura engendrada por el Hades mismo en cópula perniciosa con Venus.... o algo del estilo. Por el contrario, el hombre que llama a una mujer puta, lo hace señalándole que ella no entra en los parámetros impuestos por la sociedad para considerarsela candidata para el matrimonio y la maternidad, los fines últimos a los que inconscientemente debeía aspirar una mujer. Punto.

Mi reflexión en torno a este término de "etimología incierta", tal y como dice el diccionario etimológico de Joan Coromiras, es producto de un airado correo electrónico que me llegó el martes. Una "señorita" (favor leer el sentido irónico del término el entre comillado), con todo el legítimo derecho de defender su "derecho de propiedad" pues viven juntos desde hace 2 años (no me aclara si casada o no pero viven juntos) se explaya en improperios en los que la palabra "puta" se ve combinada con adjetivos aumentativos, circunstanciales y hasta zoológicos. Y luego, oh belleza la que se esconde en la incoherencia de los humanos furibundos, tras insultarme por querer robarle lo que le pertenece, pasa a regalármelo! Y, como si no le bastara con eso, felíz de hacerme semejante regalo, me dice que puedo "revolcarme" con él a satisfacción.

No pude sino atacarme de la risa. Regalar lo que no se posee, qué curioso regalo!! Lejos de sentirme insultada, me sentí halagada. Me acababa de regalar a un hombre que es amigo mío desde hace como 2 años, que vive a más de 14 mil kilómetros de mí y que, en el mejor de los casos, por lo menos de poesía y literatura podemos hablar porque él me ha mandado poemas escritos por él para ella, la niña de los insultos (si supiera lo procaz que es ese "lucero del alba de sol por mirada"... ) y a quien yo, igualmente, le he enviado poemas y escritos de mi blog y mis "offline" en una especie de "intercambio creativo".

Me imaginó que se leyó todos los escritos y poemas (unos 7 poemas, unos 14 escritos) que le he mandado a mi amigo que no puede leer mi blog desde su oficina y que le encanta recibir "de tanto en tanto" algo que tenga yo a bien mandarle. Es que él es tan así que ni me pide que sea a diario ni de un tema en particular... sólo lo que me provoque mandarle. Y he debido de mandarle ese celebérrimo post mío del mes de septiembre que marcó pauta y "rompió records en taquilla y audiencia", el de "Y qué tiene de malo montar cachos?", para pedirle que se vuelva a leer esta frase "parafraseando a Claudio Nazoa en su artículo de "Nadie es Fiel": los cachos son más grandes y más gozosos mientras mayor sea la vigilancia, los celos, la represión y el control que impongan los celosos compañeros de los adúlteros. Les quedó claro a los celosos? Por lo menos se los advertí."

Lo que me da más risa? Se los cuento? Se me hace que ella necesita que él le preste atención porque me pide que le cuente a él que ella me escribió, que le llore a él para que me consuele y "me gustaria que me contestaras este correo dandome las gracias por el gran regalo que te estoy haciendo GRANDISIMA PUTA".

Será que no tengo moral de verdad? Que carezco de principios morales? Será que me importa tan poco la convención social en la que ella me inscribe que hasta risa me da? Creo que lo que me da risa es el saber que ella se ha rebajado a un lugar mucho más ruin en la escala social pues, en su inseguridad personal y su gran vacio de afecto, ella se conviertió en una vulgar ladrona que, con premeditación, se metió en la pc de mi amigo, le hurgó y rebuscó en archivos y carpetas "para ver qué le consigo" y, finalmente, como no consiguió nada, usando su clave secreta, se metió en el correo electrónico de él y le revisó los correos y encontró los míos. A continuación, usando su propia cuenta de correo (en el fondo, debe querer que se la considere importante e imponente... "no tengo miedo de darte mi cuenta ni que me escribas a mí directamente...") me envió el airado correo del que les comento.

A mi amigo no le voy a decir absolutamente nada de nada. El no se lee mi blog porque no puede por lo de la internet restringida en la oficina. Enviarle ese correo procaz de ella no ayuda a nadie a resolver ningún conflicto. Sé que ella, airada porque no le respondo yo, "la puta", le sacará en cara a él algo de lo que ella "ya sabe"... la imaginación es una fuerza maravillosa: crea tanto como destruye.

Creo que a esa invasión a la computadora, los archivos, carpetas y, finalmente, la cuenta de correos de él, se le podría llamar una "violación". No sé si las leyes tipifican y condenan esos crímenes. Yo, en lo que me respecta, no me sé la clave del correo de mi esposo y, aún sabiéndola, soy incapaz de meterme en su cuenta por NINGUN motivo... porque mi ética me dice que nada en este mundo justifica que yo me rebaje al papel de ladronzuela barata.

Como cuando algo se te revela como un absurdo, me dió por reir cuando leí ese correo. Sigo riéndome... soy una "puta" felíz... y no una "ladrona" amargada. Qué es mejor? Tengo motivos para reirme? Yo creo que sí...

Descubrimiento

Vamos a ver... por dónde empiezo? Por el principio? Debería... por lo menos sería más lógico.
Me quedé en casa porque estoy enfermita de la garganta y me duele. Por fortuna, fiebre no tengo. Ayer me llamaron lesbiana en un correo que me mandó el marido de una amiga. Anteayer puta en otro correo que me mandó la querida o novia, amante (o lo que sea) de un amigo. Sin el firme propósito de hacerme reir, riéndose él mismo del cuento, un amigo del alma anoche me decía que él me iba a decir necrófila "para desempatar"... besos todos para tí, D, por esa que me hizo carcajearme.

Entre las 7 horas diarias de clases, las 3 horas y media de viaje que me toma hacer el "ida y vuelta" de mi casa a Brujas para las clases y las 6 horas diarias de sueño, se me ha hecho casi imposible escribir porque no me da tiempo de nada. Tengo a todo el mundo bloqueado en el messenger... porque no puedo escribir ni lo poco que escribo si chateo con todos los que se merecen mi pequeño y rudimentario cariño. No he terminado de transcribir ni uno de los posts que escribo entre el ida y venida a las clases, en el tren. Creo que eso lo haré hoy. Escribo hasta en la clase en medio del fastidio del repaso...

Porque esa es otra: he descubierto que tengo un vicio. No fumo, no bebo, pero escribo. Maldito vicio que me consume las venas porque sufro, cual nicotino-dependiente, de síndrome de abstinencia y, si no escribo me pongo ansiosa y me desespero. Señores, tengo vicio. Y se me ha exacerbado porque es como una dieta: basta que te digan "no puede comer tal cosa" para que te provoque eso que, de lo contrario, jamás te hubiera provocado. Como no tengo pc portátil ni puedo conectarme a ninguna pc en la clase, no puedo sacar todo lo que siento en un post que pueda compartir con los pocos o los muchos que me leen. No puedo... lo que me da más ganas de hacerlo. Me da vergüenza hacer ping 2 días seguidos con el mismo artículo en la primera plana del blog. Me da ansiedad no poder transcribir todo lo que siento a diario. Me da ansiedad no poder escribir...

Y me he dado cuenta de que, antes de esto, no podía entender completamente aquello que me decía mi amigo D y que explica Rosa Montero en su libro La loca de la casa que me he leído en 3 días... y voy a volvérmelo a leer. Les informo: me defino a través de las palabras. Mi amigo D, el mismo que me dijo que me iba a decir necrófila para "desempatar", me dijo en estos días en una conversa "la escritura la define". Y le pedí que se explicara. "Somos los actos, no? Lo que hacemos, lo que nos sale por natura. Bueno, a usted, por natura, lo que mejor le sale es escribir. Por eso la define".

Ese es su juicio. El es escritor y me dice que lo mejor que me sale es escribir y me ha dicho que lo hago "tan bien" que "en muchos aspectos es mucho mejor que yo que soy escritor" . Y el tiene unos 38 años escribiendo, como dice en su post de ayer. Por supuesto, su opinión me viene dada con un enorme conjunto de experiencias relacionadas con la escritura y la publicación de libros. Y me llena enormemente que alguien así, desde su sabiduría, me vea como alguien tan válido... a pesar de que yo no me creo capaz de proeza alguna.

Y a la vez, no tengo que ser una heroína en nada para poder escribir. Parece que el escribir, va dado por una serie de factores intrínsecos a la persona que escribe y que el resto del mundo considera "un poco loca". Somos locos los que escribimos. Tenemos que serlo. Lo que pasa es que nos lo escondemos muy hondo. Sino, la gente nos encerraría en un manicomio.

Que por qué lo digo? La palabra nos posee y la imaginación se nos desborda. La óptica que tenemos frente a la vida asusta. Leer a Montero me ha revelado a mi misma. Yo creí que todo el mundo era como yo hasta que leí en su libro que ella ha descubierto que ella tiene a la imaginación desbordada porque ve algo trivial que en ese momento la atrae... y se crea toda una historia en torno a eso. Y fue como si me hubiera dado contra la naríz porque exactamente eso es lo que me pasa a mí... Pero hasta que yo lo leí en su libro, no sabía que eso no le pasa a TODAS las personas del planeta...

Ejemplo? Ejemplito, okey. En estos días iba en el tren sentadita, escribiendo el post "una milonga de tren" (Lestat, cuando quieras, pásame milongas que yo felíz me las oigo todas, no te puedo pasar porque no tengo sino una solita...te puedo pasar música de cualquier otro género si te provoca) y veo a un señor frente a mí que estaba viéndome fijo, mientras yo garrapateaba frenética en mi cuaderno en la minúscula mesita entre asientos que se miran uno al otro. He debido de ser una figura curiosa: la cartera al lado de mi muslo izquierdo, el bolso frente a la cartera, el suéter estaba encima del bolso y la cartera, sin doblarlo, sólo tirado; el abrigo colgaba detrás de mi hombro izquierdo y yo le daba un poco la espalda a la ventana, acomodada para escribir como escribimos los diestros en un escritorio cualquiera. Y tenía unos 25 minutos de los 45 del viaje garrapateando con y sin desayuno. Nada me había parado... a ratos, daba vuelta a la hoja, tachaba algo, buscaba una hoja nueva, garrapateaba algo, le arrancaba ese pedazo, hacía un asterisco en el texto y "metía" ese párrafo allí... y seguía con lo mío. Arepa incluida.

Fue hasta que ví a ese señor, con el periódico en las manos, los lentes en la punta de la naríz, viéndome con su presbicia por encima de los lentes, la frente arrugada por el gesto para ver por encima de los lentes y su expresión de perplejidad, que comprendí que yo debía parecerle algo raro. De inmediato bajó la mirada y la volvió a levantar como para comprobar si yo también la había bajado... y la volvió a bajar porque yo continuaba mirándolo mientras pensaba en eso, que yo debía parecerle algo raro. Estiró su periódico y se volvió a sentar, con la cabeza erguida, viendo al pasillo del tren... mirándome a cada tanto con el rabillo del ojo.

En ese momento, en ese instante, me "desdoblé" y mi otro yo, el imaginativo, se apoderó de mí: el señor se convirtió en un agente secreto de 1945 y trataba de ver lo que escribía yo para verificar que no fuera en otro idioma (razón más que suficiente para considerarme espía internacional) y, segundo, para tratar de adivinar de qué iba el escrito. Me puse nerviosa pensando que el espionaje y el contraespionaje no han sido erradicados de la faz de la tierra, que el señor quizás, de verdad, podía ser un espía y procuraba ver si había rastros de eso en él. "Claro que no, tonta, los espías están entrenados para lucir como gente normal... y quizás la fisgoneadera tan descarada es sólo para ditraerte porque puede haber alguien más espiándote a ver si no eres una extranjera de estas que instalan bombas en los trenes como pasó en Marid..."

Y allí, tras ese breve regreso al " yo normal", me volví a salir al "imaginativo": "Y qué pasaría si este tren tuviera un par de bombas? Y si se supone que estallen en Lichtervelde, la 1ra estación más grande de esta ruta? No... porque esa es muy pequeña. Si hubiera una bomba, estaría programada para estallar llegando a Brujas, una estación más grande que comunica con muchas estaciones de los flandes occidentales, orientales y hasta Bruselas... Allí es donde detonaría la bomba, en Brujas. Y pararía el tráfico de varias líneas de trenes... .y buena parte del país."

De inmediato ví los titulares en la escandalizada prensa belga "Ataque terrorista en la estación de Brujas"... ví las fotos de la estación... la plataforma tenía el techo volado, los incendios localizados contrastarían con el frío de esa mañana, la gente en la estación corriendo por la puerta de salida a todo dar y en masa, los heridos, las ambulancias llegando, oí la sirena de por estos lados, me imaginé que la señora de más allá, que lucía tan seria y calmada se convertía en una histérica que lloraba de la desesperación y que rezaba a todo lo que ella creía para que nos salvara a todos de ese desastre y ese infierno... me pregunté si acaso yo sería una de los heridos o una de los muertos... qué pasaría si algo así pasara... si una bomba explotara y yo no lo contara? Qué sería de Joris? Qué sería de mis padres y mi hermanita? Qué pasaría con todos ellos?

"Cancelado", me dije a mi misma en ese momento, recordando mis enseñanzas espirituales sobre la fuerza de la palabra. "La vida te sonríe amplia y largamente... cancela esa idea fatalista y tonta! La energía, la palabra es energía..."

Volví a ver al señor frente a mí, que volvió a bajar la mirada porque lo pesqué viéndome. Volteé por encima de mi hombro a ver si era que él le estaba haciendo señas a algún compañero porque yo no parecía sospechosa de planificar un atentado con bombas... pero había que vigilarme porque escribía como desaforada y en idioma "rarito". Ví la palabra "milonga" en la página que estaba escribiendo... y tras releer algunos párrafos, arranqué a escribir otra vez.

Si alguien estaba viéndome, seguro se imaginó "estaba esperando que la musa le soplara al oído y la imaginación le diera, otra vez, la pauta para seguir". En realidad nadie sabe que de 1945 pasé al 2005 en un sólo plumazo.

Y así vivo yo... en esa borrosa línea que separa la imaginación de la realidad. Tengo en la cabeza un cúmulo de ideas que quieren salir y sé, que al final, saldrá algo que no era lo que planeaba escribir. En este post pensaba hablarles de que a pesar de lo que me pasa, sigo tranquila, optimista, segura de que en 3 días voy a estar mucho mejor, de que me reí un mundo con el comentario tan procáz y soez de la indignada novia, querida o amante del amigo mío... Y que esos posts que no he publicado, seguramente hoy podría terminarlos para darles material de lectura a rabiar. Iba a hablarles del clima otoñal que ya empezó a calar en los huesos y minarme la salud. Iba a decirles que no les había podido escribir porque no tengo tiempo ni para mí. iba, finalmente, a contarles que creo que esta semana me ha ido cuesta arriba en todo porque Marte está retrógrado en Tauro y eso hace que sea un período en el que se favorece el trabajar duro... En realidad, ya ven de lo que hablé? De mi imaginación desbordada y el descubrimiento de que, en realidad, sí soy tan humana como para tener un vicio.

Y qué vicio...

lunes, octubre 03, 2005

Una milonga de tren

"M, pásame una milonga, tienes?"

Somo si pudiera ver su rostro, despojado de la barba que otrora le diera a mi amigo aires de un redentor Jesucristo, con sus pequeños ojos color guarapo de papelón muy abiertos, me tecléó como respuesta "Una milonga? De qué hablas?"

Emulando a una músico (es "músico", invariablemente, para referirse a la persona? Por qué a veces la lengua es tan caprichosa y a veces tan machista?) dando clases a un pinchadisco (o DJ), le dije "género musical argentino del que, según los entendidos, deriva el tango".

Tras algunos segundos, lo veo que empieza a teclearme una respuesta: "sí, yo sé lo que es una milonga, lo que no sé es para qué quieres una milonga tú..." sin confesar abiertamente mis intenciones, le respondí: "Curiosidad. Quiero escribir algo en torno a una milonga y necesito una, aunque sólo sea una, para inspirarme". La respuesta de M fue una carcajada seguida de un irónico (pero no malintencionado) "vas a hablar de algo que no conoces?".

En realidad estoy habituada a hacer eso. No conozco todos los puntos a tratar ni todas las visiones posibles de todo lo que escribo. Sé que, realmente, no sé nada de nada. Y esa, igual que el filósofo griego, es mi única certeza.

"No sabemos todo de nada, no te parece? Además, te pregunté si tenías una milonga y quieres sabe qué quiero hacer con ella, en vez de decirme si la tienes o no. Tienes una milonga? Cuando veas lo que quiero hacer con ella, seguro te vas a reir... por eso no te quiero decir, para que no te rías por adelantado." Volví a hacer como "El Principito": hasta que leí ese libro a los 11 años no sabía que había alguien que, como yo, insistía sobre una pregunta hasta que le respondían algo. Por poco que fuera la respuesta.

"No, no tengo", dijo M. Pero añadió "tienes alguna preferencia en particular?" Y le dije que no, que sólo quería una milonga. M me respondió con la dulzura que le es característica a ese par de pocillos con guarapo de papelón que son sus ojos: "es que le voy a preguntar a mi viejo cuál es la mejor, según él, y busco entre sus discos para ripiarla y pasártela, OK?"

Conmovida, le dije "OK" muy escuetamente. Hasta crítico musical iba a tener!!! El padre de M es un hombre muy simpático, de una gentileza y calma que desdicen su contextura corpulenta y tosca. M es tan gentil como su padre, aunque siempre me pregunté por qué él era tan flacuchito y exiguo si su padre y su madre eran, desde jóvenes (he visto fotos de ambos), mucho más atléticos.

Al rato, mientras yo leía con los ojos grandes como un mundo un mail que me mandó el muso que me inspiró la nota de "Adiós.. .a tí", me escribió M "estoy ripiando la canción. Mi viejo se emocionó todo, que qué maravilla, que por fin me intereso por mis raíces y no sólo el rock... Le tuve que decir que no era yo sino tú el interesado y se quedó mudo y me decía "Laura? La misma de cuando tu accidente? Y qué es de su vida?" Y de vaina no le dió un infarto cuando le conté que estabas casada, en Bélgica, escribiendo en un blog a ver qué sacas en claro para una novela y que ahora te había dado por milongas".

No pude menos que reirme y decirle "y seguro que tú te cagas de la risa por dentro después de dejar patitieso a tu viejo con ese resumen conciso y inesperado de mi vida, verdad?" A lo que él respondió "Claaaaaaaaaro!!! Ataja que ahí te va..."

Y M me estaba mandando una milonga.

El jueves empecé un nuevo curso de Holandés para ver si algún día capto algo del mundo que me rodea en este pedazo del país en el que vivo, existo y no soy. De eso hablaré algún día, si alguien me pregunta. Con este curso de holandés empiezo un par de nuevas aventuras. Una de ellas es la de viajar en trenes a hora pico.

No es que yo no conociera los trenes antes de venir a Bélgica. En Inglaterra viajé en los asientos abatibles, cerca de los baños de un vagón, desde Londres hasta Edimburgo por cuatro largas horas que se hicieron mucho más largas con la compañia de dos suizos (un chico y una chica) y más amenas con mi diario de viaje que estaba escribiendo. En Inglaterra viajé en trenes hasta que me "maté la fiebre". En Francia también viajé por trenes. Varios. Diferentes líneas tienen diferentes olores. Eso lo descubrí en la tierra donde, irónicamente, o quizás a propósito, se masificaron los perfumes.

Sin embargo, mi "madurez ferroviaria" se la debo al sistema belga: un servicio diseñado, como todo en Bélgica, para complicar lo simple y alterar el orden lógico de las cosas. ejemplo? Las tablas de los horarios que, para el ojo inexperto, casi parecen unos papiros decorados con algún idioma que recuerda la escritura cuneiforme....

De resto, un tren se me antoja como un banco de plaza: la gente va y viene, entra o sale y, exceptuando el hecho de que tu cuerpo se mueve lado a lado o brinca al compás que le imprime a la cajita de metal los rieles por los que se desplaza, puedes hacer todo lo que se te antoja hacer en un banco de plaza: ver como todo pasa, comer, leer la prensa, hacer arrumacos a tu pareja y, dependiendo de la hora, la presencia de voyeurs y las ganas del momento... hasta algo más que arrumacos.

Ahora bien, viajar en un tren, a hora pico, es algo que yo desconocía. A esa hora, los trenes se despojan de todo el carácter romántico que alguien pudiera darles a pesar de la tecnología y los colores pasteles y fríos "para calmar a las fieras". Seamos sinceros, para el que no ha viajado antes en la famosa cajita sobre rieles, la experiencia se les antoja llena del lujo y exotismo del Expreso de Oriente.

En realidad, el tren se parece más a cualquier metro o autobús en el que hayan viajado: el que está más cerca de la estación de origen que de la de llegada tiene más posibilidades de conseguir asiento, debes comprar un ticket para ingresar al sistema y si te pillan sin el ticket te multan, debes respetar a los demás pasajeros y al personal del sistema... y correr para llegar a tiempo. No niego que hay diferencias entre el metro y el tren, pero algún día les hablaré al respecto.

Lo de viajar a hora pico tampoco era novedad para mí: en Caracas, más de una vez sentí la respiración, a veces calmada, de algún pasajero a mi espalda. De igual modo, iba yo respirándole en el brazo o en el hombro a algún otro incauto...

En este pueblito al que he venido a parar no hay mucho que hacer y, para seguir el primer curso de holandés que hice, hube de viajar por 8 meses a Kortrijk. Ahora me toca viajar a Brujas para este curso superintensivo que he tomado en un esfuerzo final por adquirir una entidad frente a los demás... una entidad que me permita decir, ante todo, que soy. Para ir al curso que me promete ponerme al nivel de Van Eyck en 5 meses, he de viajar a pie, en autobús, en tren, en autobús y a pie otra vez... con la meta del llegar al salón de clases antes de las 8:30 am.

He comprobado que esta hazaña de llegar a la hora a la clase es tan complicada como aprender a bailar una milonga: hay que saberse de memoria una serie de pasos, hay que estar pendiente de los movimientos del compañero y, lo más importante, hay que seguir el ritmo de la música. Perder el pie o el ritmo, implica que nos perederemos el resto de la milonga y, al final, hasta al compañero... en un genuino desencanto por nuestra actuación.

Esta mañana, como el resto de las mañanas que me tocarán en los próximos 5 meses mientras de oruga paso a mariposa Van Eyck, apagué el despertador, me sacudí el sueño, me despegué de la cama, bajé 17 escalones con cuidado para no terminar como Juan Luis Guerra en la canciónd e "el Niágara en Bicicleta" (como guanábana en la alcantarilla), me desperté con una ducha después de montar las arepas que me desayuno en la estación, esperando al tren (porque no me da tiempo antes), saqué a mi esposo de la cama y me peleé con la vianda de la merienda entre clases.

A las 7:13 am, parada en la plataforma de la estación, esperando para tomar el tren que me llevaría a mi destino, luego de haber caminado unas 8 cuadras para llegar a la parada del autobús que me pasea por 20 minutos entre dos pueblos, con unos 7 grados centígrados como cobija, una arepa en la mano, la boca llena, la respiración sosegada y el humo saliéndome por la naríz, tarareaba en mi cabeza la milonga que mi crítico musical recomendara. Quizás fuera en un intento mío por no perder el ritmo de mi ánimo en medio de los pasos a seguir (pie, bus, tren, bus, pie.. .otra vez!), y sin olvidar que tengo un compañero que no puedo perder...

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